“La Conquista
del Éxito”.
La
Conquista del Éxito, pasa por entender cómo funciona nuestro cerebro, y, esa concepción
de separación que desde los griegos se ha querido hacer entre la razón y la
pasión. Dicho de otra forma, el gran dilema de actuar con la razón separando
las emociones. Pero hoy en día, sabemos gracias a los estudios del cerebro realizados
en los años 90 por el Dr. Giacomo Rizzolatti, quien era Director del
Departamento de Neurociencia de la Universidad de Parma, que en nuestro cerebro
la corteza cerebral donde se llevan a cabo las funciones cerebrales complejas
como la memoria, la atención, la conciencia y el lenguaje, conocida también
como el área encargada de la razón; contrariamente a lo que se creía, esta no
trabaja en forma independiente de otras funciones del cerebro, como por ejemplo,
las ubicadas en el llamado cerebro límbico, responsable por el manejo y
respuesta de nuestras emociones, siendo todo esto posible gracias al
descubrimiento de las neuronas espejo por parte del Dr. Rizzolatti y su equipo.
Ya sabemos que estas neuronas, nos proporcionan una representación interna de
las acciones, tanto propias como ajenas, siendo también responsables de
comportamientos como el reconocimiento, la imitación y la empatía. En
conclusión, nuestro cerebro trabaja en forma integrada y su funcionamiento así
lo demuestra, por lo tanto, es importante a la hora de programarnos para
alcanzar nuestras metas y objetivos, conocer y comprender como funciona nuestro
cerebro, y la importancia que nuestras emociones tienen para el logro de las
mismas.
A
continuación explico el primero de los trece pasos que he diseñado para
alcanzar el Éxito.
Primer
paso: Definir en forma clara nuestro
objetivo. Lo más importante en la vida es saber lo que queremos y hacia
dónde vamos, pues de lo contrario creamos la duda y confusión en nuestro cerebro
de que es lo que realmente queremos obtener o conseguir. Un ejemplo muy claro
de esto, es cuando una bella mujer me dice: Yo quiero tener una pareja pero no
la encuentro. La situación de conseguir o no conseguir es pareja, es el
siguiente paso, pero lo primero es que ni siquiera se ha definido con claridad,
que tipo de pareja se quiere tener. En el caso que nos ocupa, podría ser: quiero
un hombre maduro, inteligente, que me respete, que me comprenda, etc. Definir
en forma específica y clara lo que queremos, genera dos beneficios a nuestro
cerebro, uno permite eliminar la duda de nuestra mente, y, dos facilita el
enfoque para conseguir el objetivo. Esta descripción específica y detallada de
nuestros objetivos, puede servirnos para todo tipo de metas, como por ejemplo:
El adelgazar 5, 6, 7 kilos, los que deseen hacerlo en este año que comienza. Por
otra parte, considero importante compartir algunos consejos útiles a la hora de
definir nuestros objetivos en forma clara y precisa:
Toma
papel y lápiz para escribirlos, recuerda que lo que no está escrito no lo procesa nuestro cerebro.
Seamos
descriptivos a la hora de definir nuestras metas u objetivos, no hay que
escatimar en la utilización de palabras, adjetivos y frases. Ejemplo: Quiero
adelgazar 6 kilos en 7 meses.
Establezcamos
objetivos reales y específicos a corto, mediano y largo plazo; es decir,
objetivos alcanzables. Si yo estableciera como objetivo el comprarme una casa
de $1,000.0000.00, durante los próximos 6 meses, tendríamos que evaluar si ese
sueño con mis ingresos actuales o la proyección de ellos u otras fuentes de
ingresos en los próximos 6 meses es realmente alcanzable o no. De lo contrario,
nuestros sueños los dejamos al azar, a la aventura, y esto equivale como a
jugarnos un número de lotería, donde nos podemos ganar el premio mayor o
simplemente no ganarlo, con las consecuencias emocionales que ello causa.
Para
establecer objetivos alcanzables la fórmula es muy sencilla, tiene que ser un
objetivo o meta, que nos motive a querer lograrla o conseguirla como el aire
que respiramos. Es decir, si nosotros no respiramos morimos, y, alcanzar esa
meta y objetivo tiene que convertirse en lo más importante en este instante, en
este momento en nuestra vida. En nuestro ejemplo de adelgazar, para lograrlo,
debemos estar convencidos, apasionados y motivados para lograr el objetivo de
adelgazar 7 kilos. Pero aquí surge la pregunta: ¿Cuál es la razón que me mueve
e inspira para lograrlo? Esta es la pregunta clave, y dependiendo de la
respuesta se sientan las bases o no para el logro nuestros objetivos.
Nuestros
objetivos deben ser definidos más allá de nuestra situación, posición o
realidad actual. Pues ella, simplemente puede ser una circunstancia producto de
las decisiones que hemos tomado hasta ahora en nuestra vida. Por ello es
importante, pensar en grande, más allá de nuestros estándares actuales de vida,
negocio, trabajo, situación financiera, familiar o emocional. Este es nuestro
momento, para escribir en nuestro papel un objetivo, una meta, un sueño, lo
suficientemente grande a lograr, que nos produzca pasión, compromiso y
felicidad. Dicho de otra manera, ha llegado el momento de sembrar en nuestra
mente la semilla de grandeza que nos merecemos.
En
fin, a la hora de definir nuestros objetivos o sueños, siempre es una buena
idea hacerla con nuestro cerebro integral; es decir, agregándole una buena
dosis de razón y una gran dosis de pasión y Fe por lo que queremos lograr.
Por el Dr. José Manuel Rizzo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario